CC: Vampiros Americanos


Soy una de esas personas insufribles que se da vueltas en una misma idea por varios días o semanas... y hasta meses. Sí... hasta meses.

Actualmente estoy evaluando qué revistas encargar para expresar cuánto me quiero y decidí leer American Vampire antes de dejarme llevar por los comentarios y encargar el primer Hardcover de la serie, lo que debo decir, fue bastante sensato ya que 25 dólares no es una suma de dinero despreciable.

American Vampire es la historia de una nueva casta de Vampiros, los Vampiros Estadounidenses, creados como un subproducto involuntario de la conquista del Lejano Oeste de Norteamérica por un muy particular grupo de empresarios europeos.

Lo que hay que saber de American Vampire lo cuenta su creador (Scott Snyder), en la Editorial que publicó DC Comics junto al primer número de la serie. Cada tanto la sangre de los vampiros se mezcla con la sangre de nuevos humanos de algún nuevo lugar y da forma a una nueva casta de Vampiros con nuevos poderes, que tienen al mundo y a sus propios creadores como enemigos.

La protagonista de American Vampire es Pearl Jones, una joven de provincia que llega a Los Angeles en busca de convertirse en una actriz de Hollywood y que acaba sus días agonizando en una zanja en medio del desierto junto a los cadáveres de otras jóvenes que al igual que ella han servido de alimento para una cofradía secreta de Vampiros, que son además productores de Cine. La otra mitad de la historia le corresponde a Skinner Sweet, un criminal sicópata del Viejo Oeste, que por una extraña serie de eventos se transforma en el primer miembro de la nueva casta.

American Vampire es una historia de Horror con una vuelta de tuerca xenófoba y algún grado de realismo/ambientación histórica, que tiene su mayor fortaleza en el atractivo de sus personajes centrales, que probablemente poco tengan en común más allá su espíritu emprendedor y su raza...el del forajido sicópata del lejano oeste, que parece más interesado en desafiar a a autoridad que en robar dinero; y el de la joven de provincia que quiere triunfar en la naciente industria del cine en la época en que el sonido se erigía como la gran novedad técnica de la industria. Lamentablemente esta fortaleza no se extiende al resto de los personajes... es un poco prematuro juzgar eso cuando van apenas 5 números (los que he leído) y no queda muy claro aún quienes formarán el "elenco" de la serie, pero Stephen King hace un mucho mejor trabajo en dotar de alma y vida a sus protagonistas y antagonistas (que lamentablemente se mueren), que el que realiza Snyder, quien tiene bastante éxito con su protagonista, pero no así con el resto de los personajes que resultan algo planos.

El dibujo de Rafael Albuquerque es simplemente espectacular... aunque no tiene mucho que ver con lo que hacen las superestrellas del cómic de superhéroes. Albuquerque ha trabajado en editoriales como BOOM! y fue el dibujante de Blue Beetle por un buen tiempo (asumiendo el relevo de Cully Hammer), y el estilo que desarrolla aquí es una progresión lógica (y fantástica), de lo que le habíamos visto. Albuquerque es brasilero y el diseño que hace de los elementos de época recuerda a incontables películas estadounidenses (supongo que tiene un "background" de cutura pop bastante similar al nuestro, o el mío al menos), pero lo que encuentro notable es que a pesar de dibujar un cómic mensual de más de treinta páginas, donde la revista está dividida salomónicamente entre el debutante Scott Snyder y el escritor superventas Stephen King, logra darle una cierta identidad artística a cada sección de la revista y que en ningún momento su trabajo parezca descuidado o apurado... algo que muchos otros quisieran poder decir.

El estilo de Albuquerque está medio camino entre el realismo y la caricatura, lo que beneficia mucho la narrativa de la historia. Se trata de un dibujante con mucho rango de expresividad para sus personajes y que logra matizar su trazo para provocar mayor contraste entre la normalidad de algunas escenas y el horror de los giros que toma la historia. Transición en la que también ayuda muchísimo el excelente trabajo de Dan McCaig (el colorista), quien utiliza dos estilos perfectamente distintivos para cada sección de la revista, los años 20 que escribe Snyder, y la historia del origen de Skinner Sweet, que es la que escribe Stephen King.

Conociéndome, supongo que se estarán preguntando qué le encontré de malo a la historia... la verdad es que nada, es sólo que a estas alturas ya he leído o visto historias de vampiros militares, detectives, detectives privados, llorones, con y sin alma, atormentados por su conciencia, sicópatas irredimibles y un larguísimo "etcétera" y si bien Snyder logra darle una vuelta de tuerca entre clasista y xenófoba a la historia, no me queda del todo claro si debo hacerle barra a los protagonistas o no... lo que bien puede ser exactamente lo que estaba intentando lograr Snyder.

Mi apreciación es que estos cinco primeros números están hasta cierto punto limitados por la presencia de King. Si bien es poco lo que se puede hacer por mejorar tener a Stephen King como co-escritor del primer arco argumental (salvo un team-up con Batman, Wolverine u Obama -o todos los anteriores-), resulta a la vez una espada de doble filo que a uno lo lean junto a él (aunque en realidad Snyder no destiñe) y quita espacio para el desarrollo de la historia, por lo que sentí que la resolución de algunos pasajes fue algo más rápida de lo que hubiese querido.

El próximo arco argumental de la serie será (aunque sea de perogrullo decirlo), determinante para el futuro de la serie. No sólo consolidará el nivel de ventas, tendrá a Snyder en solitario y a cargo de elaborar sobre la premisa que presenta con uno que otro tropiezo en esta primera historia... si lo consigue con éxito, probablemente Vertigo podrá anotar a American Vampire como uno de los pilares de su alicaída producción mensual. Recomendada.




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